Factores de Riesgo Psicosocial (NOM – 035); salud mental y condiciones laborales.

Derivado del énfasis puesto a los Factores de Riesgo Psicosocial se abonó a visibilizar y a atender la relevancia de la salud mental en el trabajo para asentar las acciones preventivas y/o correctivas que mitiguen los riesgos a los que estén expuestos los trabajadores.

Por ello, es obligación de todos promover un ambiente de trabajo saludable y productivo, abordando diversos aspectos que pueden impactar negativamente en la salud de los trabajadores. No solo por mejorar la salud y bienestar de los empleados, también porque se ha demostrado aumento de productividad y eficiencia en ambientes laborables óptimos.

¿Qué son los Riesgos Psicosociales?

Los riesgos psicosociales son situaciones o contextos que emergen de un mal entorno social, situaciones estresantes, tales como un mal ambiente laboral. Estos factores pueden tener efectos adversos sobre la salud física, social y mental de los trabajadores. Se ha identificado una serie de factores que contribuyen a estos riesgos.

Factores de Riesgo Psicosocial

Son aquellos que pueden provocar trastornos de ansiedad, no orgánicos del ciclo sueño-vigilia y de estrés grave y de adaptación. Comprende:

  1. Condiciones en el Ambiente del Trabajo: Incluye las condiciones físicas del entorno laboral. Aquí tienen lugar las condiciones peligrosas e inseguras o deficientes e insalubres. Pueden exigir un esfuerzo adicional de adaptación del trabajador y se puede contrarrestar aplicando normas de seguridad y salud en el trabajo.
  2. Factores Propios de la Actividad: Se refiere a las exigencias del trabajo en sí, como la intensidad, complejidad y carga del mismo. Por otra parte, también se contempla la falta de control sobre el trabajo que llevan a no influir y tomar decisiones en la realización de las propias actividades. Puede abarcar quedarse tiempo adicional al turno, trabajar sin parar y a un ritmo acelerado, responder ante los resultados de un área de trabajo, entre otros.
  3. Organización del Tiempo de Trabajo: La gestión ineficiente del tiempo y las jornadas laborales irregulares pueden afectar negativamente la salud de los trabajadores, ocasionando problemas de sueño y desequilibrios entre la vida laboral y personal. Por el ejemplo, el trabajo puede exigir que se labore en días de descanso, festivos, fines de semana o cuando ya se encuentra fuera del centro de trabajo.
  4. Liderazgo y Relaciones negativas: Un liderazgo inadecuado y relaciones interpersonales conflictivas en el contexto laboral pueden ser fuentes significativas de estrés. La falta de apoyo y comunicación clara incrementa la tensión y disminuye la posibilidad de funcionar como equipo de trabajo. Esto puede encerrar el no recibir información clara sobre las funciones y el objetivo del trabajo. No contar con un jefe que ayude a organizar u orientar el trabajo o tome en cuenta puntos de vista y opiniones. Tener compañeros de trabajo en los que no se confíen o cooperen al trabajo en conjunto. También se contempla el recibir críticas constantes a la persona y/o trabajo o excluirla de reuniones o toma de decisiones, entre otras.

Entorno Organizacional Favorable

Por otro lado, promover un entorno organizacional favorable incluye varias prácticas que favorezcan al empleado, tales como:

  • Sentido de Pertenencia: Fomentar un sentimiento de pertenencia y cohesión entre los empleados y la empresa.
  • Capacitación Adecuada: Ofrecer oportunidades de formación continua para el desarrollo profesional.
  • Definición y Delimitación de Responsabilidades: Clarificar las responsabilidades y roles para evitar confusiones y sobrecarga de trabajo.
  • Participación Proactiva y Comunicación: Promover la participación activa de los empleados en la toma de decisiones y asegurar una comunicación abierta y efectiva.
  • Cargas de Trabajo Adecuadas y Jornadas Regulares: Establecer cargas de trabajo razonables y horarios que permitan un equilibrio entre la vida laboral y personal.
  • Evaluación y Reconocimiento del Desempeño: Implementar sistemas justos de evaluación y reconocimiento que motiven y valoren el esfuerzo de los empleados.

Violencia Laboral

La violencia laboral se combate activamente con atención a los conflictos que surjan entre individuos y las relaciones de poder.

  • Acoso Psicológico: Comportamientos repetitivos de intimidación o menosprecio que afectan la autoestima del trabajador.
  • Hostigamiento: Acciones persistentes de persecución sobre una persona que crean un ambiente de trabajo hostil.
  • Malos Tratos por Superiores: Conductas abusivas o despectivas que deterioran la dignidad y bienestar del empleado.

Consecuencias de los Riesgos Psicosociales

Los riesgos psicosociales pueden tener diversas consecuencias sobre la salud de los trabajadores:

a) Físicos - Fisiológicos

  • Problemas y Enfermedades Cardiovasculares: El estrés crónico puede aumentar el riesgo de hipertensión y enfermedades cardíacas.
  • Dolor de Espalda y Trastornos Músculoesqueléticos: La tensión y el estrés pueden manifestarse como dolor físico.
  • Trastornos del Sueño: La ansiedad y el estrés pueden causar insomnio y otros problemas del sueño.
  • Trastornos Médicos: Afectaciones respiratorias, gastrointestinales, dermatológicas y del sistema inmunológico pueden estar asociadas al estrés laboral.

b) Psíquicos - Comportamiento

  • Depresión, Ansiedad y Estrés: Los entornos laborales negativos pueden desencadenar trastornos mentales.
  • Confusión y Falta de Atención: El estrés y la presión pueden disminuir la capacidad cognitiva.
  • Dificultad en la Toma de Decisiones: La sobrecarga emocional puede afectar la claridad mental y la capacidad decisional.
  • Sedentarismo: La falta de actividad física puede ser causa de problemas motrices y sobrepeso.
  • Agresividad y Conductas Antisociales: El estrés extremo puede llevar a comportamientos agresivos y antisociales, incluyendo el aislamiento y en casos extremos, el suicidio.
  • Conductas Relacionadas con la Adicción: El estrés puede inducir a hábitos poco saludables como fumar, consumo de drogas y alcoholismo.

Conclusión

Adoptar una Política de Prevención de Riesgos Psicosociales refleja un compromiso integral con el bienestar de sus empleados. Permite tomar decisiones y acciones en torno a mitigar los factores de riesgo psicosociales, promover un entorno organizacional favorable y combatir la violencia laboral.

Una política correctamente diseñada y ejecutada nos permite materializar un derecho fundamental como es el garantizar la salud y seguridad en todos los aspectos del trabajo.

 

Fuente: NOM-035-STPS-2018. DOF 23 de octubre de 2018.

"En MGCS estamos para apoyarte con más información respecto a lo establecido en este documento"

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